google.com, pub-3604649441034375, DIRECT, f08c47fec0942fa0

¿Qué son los activos intangibles de una empresa?

Para conocer el valor de una empresa siempre se ha acudido a los balances y cuentas de resultados, cuadro de mando, indicadores cuantificables y herramientas contables que nos proporcionaban información sobre la situación y valor de los activos de la empresa, en concreto, de sus activos materiales y tangibles tales como los edificios, instalaciones, capital social, etc.

Pero en la actualidad, las organizaciones son conscientes de que su capacidad para diferenciarse de sus competidores no reside en dichos activos físicos, fuerza de trabajo y capital. Hoy en día encontramos compañías que triunfan y que apenas cuentan con fábricas, máquinas, terrenos y locales propios para realizar su trabajo. Sus valores en libros están hasta un 90% por debajo del valor con que son cotizadas en bolsa y que otras empresas de igual éxito. Tal es el caso de Microsoft, cuya capitalización de mercado es cercana a los 70.000 millones de dólares, a pesar de poseer escasos activos tangibles.

¿Qué factores son entonces los que determinan el éxito empresarial? Entre otros, la capacidad de innovación y adaptación a los cambios del entorno, las estrategias de marketing, los conocimientos técnicos y especializados de la plantilla y su experiencia, la propiedad intelectual, la fidelidad de sus clientes o las relaciones con el entorno. Todos estos valores los aglutinamos bajo la denominación de Activos Intangibles o Capital Intelectual de las organizaciones. La relevancia que día a día están adquiriendo estos valores la ilustra a la perfección el ejemplo de Microsoft.

Una metáfora que nos permite visualizar mejor qué son los activos intangibles (o capital intelectual) y cuál es su importancia consiste en comparar una organización empresarial con un árbol, en el que hay una parte visible (las frutas o los resultados financieros) y una parte que está oculta (las raíces o el capital intelectual). Si solamente te preocupas por las frutas, será necesario que las raíces estén sanas y nutridas. Las empresas que únicamente se concentran en los frutos (los resultados financieros) e ignoran los valores escondidos (el capital intelectual), a largo plazo no subsistirán.

Resulta complicado establecer una definición concreta sobre qué se entiende por Activos Intangibles o por Capital Intelectual pero, en líneas generales, podemos decir que son el conjunto de activos estratégicos de la organización, susceptibles de generar valor para las empresas y que no pueden, desde el punto de vista legal, ser recogidos en los estados contables por su carácter inmaterial.

No todos los activos intangibles que una empresa posee constituyen una fuente de ventajas competitivas sostenibles. Tan sólo lo son aquellos que contribuyen a la generación de valor económico en la organización.

Por esta razón, resulta esencial que la empresa identifique y gestione adecuadamente estos activos intangibles, ventajas competitivas o factores de éxito, como también se les denomina. En primer lugar, porque le permiten la generación de valor para el cliente garantizando su continuidad en el mercado y en segundo lugar porque, además, le diferencian de su competencia.

Es necesario que las ventajas competitivas existentes en la empresa y aquellos factores de éxito que se han identificado como relevantes para su supervivencia, se tengan en cuenta a la hora de formular estrategias. Sobre todo si lo que se pretende es implantar esas estrategias con ventaja en el entorno actual, cambiante y altamente competitivo.

Teniendo en cuenta estas consideraciones, podríamos añadir que el conjunto de competencias y capacidades, tanto las existentes como las que sea preciso incorporar y, sobre todo, aquellas directamente relacionadas con la misión, los objetivos y la estrategia, constituyen el capital intelectual de la empresa.

Existen numerosos casos de grandes corporaciones, por todos conocidos, que ejemplifican lo que constituye el capital intelectual. Pero también existen ejemplos de pequeñas empresas que son conscientes de que su futuro pasa por la identificación de aquello que les hace diferentes a las empresas de su entorno y les permite continuar en el mercado en términos de competitividad.

Seguiremos hablando de este asunto capital para evaluar la innovación de manera efectiva y medir su impacto no sólo económico en las empresas, si no también estratégico y de posicionamiento.

Votos 0
Enviadme un correo electrónico cuando las personas hayan dejado sus comentarios –

Comentarios

  • Muy importante este articulo, pero en Colombia y puntualmente los bancos; solo valoran los activos tangibles que puedan ser parte de un mecanismo de cohaccion de exigencia de compromisos economicos.

    Es tan grave la situacion en nuestro pais, que aun teniendo dinero, le exigen muchos requisitos para simplemente abrir una cuenta para el manejo del dinero, los bancos se preocupan solamente por beneficiarse de este dinero y no de pretar un servicio de ganancias de doble via.

    Solamente observemos todo lo que se paga denomindo como costos, y es muy cercano a lo que cobran los famosos "cuentagotas" y los "agiotistas" solamente que los bancos son "legales".

  • Los activos Intangibles que provienen del capital Intelectual, son los que agregan verdadera Riqueza a las organizaciones  y un factor de diferenciación que las hace únicas. Lastima que en muchos países en vías de desarrollo aún no se ha podido entender la importancia de la valoración de los intangibles para la generación de innovaciones y ventaja competitiva sostenible. 

  • Veinte años atrás, casi nadie de preguntaba si la "reputación corporativa" podía ser parte del valor estratégico de una organización, y era bastante lógico; ya que el tema no estaba tan estudiado como en la actualidad.

    En aquel entonces, el valor estratégico para alcanzar el posicionamiento deseado de toda compañía se centraba en los activos tangibles.

    Sin embargo, hoy, el escenario ha cambiado y lo intangible se ha convertido en un factor clave de valorización para las organizaciones ante sus distintos stakeholders.

    ¿Por qué lo intangible genera valor? Esto es debido a debido a ciertas características singulares, entre ellas destacan: la capacidad diferenciadora, la inimitabilidad y el potencial de fidelización y satisfacción de los distintos escenarios que abarca una empresa. No obstante, para algunos empresarios dichos atributos aún no son suficientes para lograr poder económico, siendo su principal argumento que éstos no pueden ser administrados.

    Según Isabel López y Sandra Sotillo, consultoras de Villafañe & Asociados Consultores son cuatro los intangibles empresariales a considerar: la marca, la gestión del conocimiento, la responsabilidad corporativa y la reputación corporativa. "De los cuatro, sólo la marca puede ser considerado un activo intangible en la medida en que su valor económico dentro de poco podrá figurar y deberá figurar en el balance de cualquier empresa que cotiza"

    Yo por mi parte, añado el capital relacional como elemento de gran valor. La capacidad de generar y participar en redes, de propiciar sinergias, de colaborar, de co-crear y del co-working son competencias imprescindibles en la economía de presente (futuro).

This reply was deleted.

¡Tienes que ser miembro de OPEN Innovación Abierta para agregar comentarios!

Join OPEN Innovación Abierta

OPEN Innovación Abierta OPEN Innovacion Abierta gtag('config', 'AW-999007865');